Submitted by jorge on Mon, 18/11/2013 - 07:19
Hasta hace apenas unos años, en las cárceles españolas no encontrabas internos cumpliendo condena por delitos de tráfico, quizás algún Farruquito de turno que pasaba por la cárcel como el que entra y sale del Metro, pero poco más.
Pero hoy en día se cuentan por miles los ingresados en las prisiones, unos 3.000 por año para ser más exactos, que entran a cumplir condenas de hasta 2 y 3 meses, que bien habría sido posible sustituir por multas y/o trabajos en beneficio de la comunidad.
También es verdad que son casos de reincidentes, salvos los muy graves con resultado de lesiones irreparables o muertes.
Pero al margen de ello, hay varios factores que motivan esta invasión de conductores en las prisiones:
• El endurecimiento de las penas de tráfico con las últimas modificaciones del Código Penal.
• El continúo aumento del parque móvil en los últimos decenios.
• El incremento en la potencia y velocidad de coches y motos en detrimento de sus ligeras carrocerías y escaso peso.
• La inexperiencia de los jóvenes en la conducción en carreteras de doble vía, adaptados como se encuentran al tránsito casi exclusivo por ciudad, autovías y autopistas.
• El incremento en el consumo de bebidas alcohólicas, sustancias estupefacientes y medicamentos en general.
Además de tener en cuenta todas estas variables y como bien comenta en su entrevista el Fiscal de Seguridad Vial, que aparte de esta aportación no se moja y no responde ninguna de la preguntas claves que le realizan, lo trascendental para la prevención de los accidentes de tráfico radica en la educación y creación de una Ley que obligue a impartir esta materia en las escuelas.
Hay que impartir Educación Vial, y no estar a vueltas con los famosos 10 kilómetros por hora más o menos, que en el caso de las autopistas es el chocolate del loro.
http://politica.elpais.com/politica/2013/11/16/actualidad/1384622627_101786.html